El último susurro del reloj
Autor: Korus
La aguja del reloj ya no avanza,
pero el tiempo sigue cayendo,
una gota tras otra,
como si el mar no tuviera orillas.
Cada segundo es un eco que no se escucha.
La silla vacía me observa
como si esperara que alguien se siente.
Pero ya no hay alguien,
sólo el peso del vacío
que se acomoda en los rincones.
La ventana permanece cerrada,
el aire ya no se cuela por las grietas.
Lo que queda afuera es ruido,
y lo que queda adentro es el peso de la ausencia.
Es como estar en una habitación que se vacía
poco a poco,
sin que nadie lo note.
Las manos ya no se extienden hacia el teléfono.
Las palabras se quedaron en la pantalla
como promesas rotas que nunca llegarán.
El teléfono permanece quieto,
pero ya no importa.
Nada importa.
El colchón ya no tiene forma,
como si mi cuerpo hubiera dejado de existir en él.
La manta está arrugada,
como una página que se dobla por sí sola
sin pedir permiso.
pero ya no soy yo quien lo respira.
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